Mejoramos tu sonrisa evitando la extracción
¿Qué es la odontología conservadora?
La odontología conservadora es la técnica por la que se trata la boca evitando la extracción del diente dañado. Se utiliza para restaurar las zonas dañadas por caries y otras afecciones, limpiando y tratando el tejido dañado sin afectar al resto del diente, sellando luego la zona tratada con una obturación o empaste.
La importancia de la prevención
Una parte esencial de la odontología conservadora es la prevención. La base de la odontología preventiva se centra en mejorar las técnicas de higiene bucodental y aplicarlas constantemente.
También es importante realizar revisiones dentales periódicas, en las que se llevaran a cabo la profilaxis dental adecuada, con el fin de eliminar las bacterias orales al completo.
Durante estas revisiones bucodentales rutinarias, se puede detectar cualquier enfermedad dental incipiente. Cuanto antes se plantee un tratamiento, más fácil es apostar por la odontología conservadora.
Ventajas de realizarse un tratamiento conservador a tiempo
- Prolongar la vida útil de nuestros dientes.
- Evitar dolor de las piezas afectadas.
- Evitar infecciones en la boca.
- Evitar futuros tratamientos más complejos.
- Ahorro en cuestión de tiempo al paciente.
Tratamientos de odontología conservadora
Los tratamientos de la odontología conservadora se centran primero en eliminar el motivo de la destrucción de las piezas o tejidos, intentando conservar la mayor parte del mismo, y después en reconstruir la zona dañada con soluciones como:
Odontología mínimamente invasiva
Frente a los métodos y las técnicas más tradicionales, la odontología mínimamente invasiva persigue la óptima salud de los dientes partiendo de dos pilares básicos: prevención y tratamientos más innovadores y menos agresivos para los tejidos. Es decir, entender la odontología desde el respeto por la biología y el tejido óseo. Así, esta disciplina defiende el valor orgánico de los dientes causando el mínimo trastorno al paciente en su día a día.
Es importante inculcar acciones de prevención y trasmitir acciones que logran frenar hábitos negativos de salud oral; factores como la alimentación o hábitos de cepillado y limpieza bucal.
Empastes de composite de última generación
Los empastes diseñados para coincidir con el color de los dientes se llaman composites. Son una mezcla de material de relleno de vidrio o cuarzo que ofrece gran durabilidad y resistencia a las fracturas en restauraciones pequeñas o medianas que deben soportar una presión moderada al masticar. Se utilizan tanto en los dientes de delante como en los de detrás.
Reconstrucciones dentales
Cuando la pérdida generada por el traumatismo o la afección es grande, el dentista utilizará la reconstrucción dental. Con una resina biocompatible que se pegará a la parte del diente sana y se dará forma al nuevo diente para que el paciente recupere las funciones necesarias. Imitando el color y la forma del diente original.
Incrustaciones de composite o porcelana
Las incrustaciones dentales se utilizan para restaurar dientes, generalmente molares, sobre los que se ha realizado una endodoncia o que presentan algún tipo de fisura o fractura, pero siempre y cuando las dimensiones de la estructura remanente no obliguen a la colocación de una corona.
Microcarillas dentales
Las micro carillas dentales son un tipo específico de carillas, las cuales tienen un grosor menor que las carillas habituales. Se tratan de láminas superfinas, con un grosor similar al de las lentes de contacto, lo que permite llevar a cabo procedimientos sin anestesia y sin realizar tallado dental.
Endodoncias
La endodoncia es un procedimiento que se lleva a cabo cuando la pulpa del diente está dañada y debe ser retirada. La pulpa del diente que es la parte interior que contiene los nervios y los vasos sanguíneos se elimina y después se sella el conducto para evitar bacterias.